Joseph Blatter, El Último Gran Dictador Del Fútbol
Por Hugo Carreón
@doblecincomx
La vida de Joseph Blatter estuvo ligada siempre a los deportes, desde niño su pasión más grande fue el fútbol y pese a practicar el hockey y hasta ser directivo de la Federación de ese deporte en su país, la pelota siempre le llamó la atención, a tal punto que estuvo cerca de ser profesional, de no ser porque su padre se lo prohibió.
Blatter se unió a la FIFA en 1975 gracias a su trabajo en la Federación de hockey de su país, a partir de ese momento trabajó para el máximo organismo que rige el fútbol como Director de Desarrollo y ya desde sus primeros años se hablaba, siempre sin comprobarle nada, de manejos turbios.
De hecho algunos creen que para el Mundial de Argentina 1978, fue él, que para ese entonces comenzó a ganarse el puesto de secretario general de FIFA, quien “ayudó” a la designación del país sudamericano cuando muchas federaciones se oponían al conocer el clima político que se vivía en aquella época en Argentina.
Sepp Blatter fue el soldado más fiel de Joao Havelange que le terminó cediendo el trono de FIFA en 1998 y éste fue casualmente bajo la duda de su contrincante, Lenart Johansson, quien siempre sospechó que su derrota no fue ni justa, ni mucho menos limpia.
Su primer gran escándalo fue cuatro años después cuando tuvo que justificar la ayuda descarada de parte del Comité Organizador para Corea que recibió favores arbitrales que lo pusieron en semifinales de ese torneo.
Ya para 2011 comenzaron con más fuerza los rumores sobre sobornos y arreglos debajo de la mesa para la designación de ciertas plazas y desde luego de parte de la CONCACAF con quien tenía un particular arreglo que en estos días quedó expuesto.
A cambio de votos para su reelección, Blatter terminó por darle un cupo más a las selecciones de norte y centroamérica, algo que era una especie de secreto a voces y que tras las investigaciones quedó confirmado, pero ese es sólo uno de los múltiples casos en los que estaría envuelto Blatter.
Y para aumentar las sospechas, FIFA designó a Qatar como sede del Mundial 2022, situación que despertó las suspicacias de los ingleses que contendían con el país del medio oriente, poco tiempo después un informe del diario británico Sunday Times, señalaba con detalles como a base de sobornos que se calculan en más de 4 millones de dólares a federaciones y gente del comité ejecutivo para asegurar que Qatar se quedara con el mundial.
Ese tal vez fue el primer traspié que realmente puso a temblar a Blatter, las investigaciones por aquel entonces eran solo periodísticas pero más tarde se hizo cargo la Interpol y el FBI, fue así como horas antes del inicio del 65 Congreso de FIFA, la policía suiza mediante un pedido de la justicia de los Estados Unidos, arrestó a siete miembros del comité ejecutivo bajo la sospecha de recibir más de 150 millones de dólares, al mismo tiempo la policía allana las oficinas de la CONCACAF con sede en Miami.
También se investigó a las oficinas de la empresa argentina de TV Torneos y Competencias de quien se sospecha tener algunos contubernios con Blatter y en su momento con el hombre fuerte del futbol argentino, Julio Grondona que falleció el año pasado.
Apenas unos días después fue reelecto bajo mucha polémica y muchas federaciones en contra de su nuevo mandato y pese a los problemas que atraviesa FIFA, Blatter volvió a ganar y todo apuntaba a que se mantuviera un ciclo más bajo el misterio y la sospecha, el hombre que solía llamar al organismo como “La familia FIFA” volvía a ganar pero ya no con toda la familia a su favor.
Las investigaciones siguen y para colmo, uno de sus hombres más cercanos, Jerome Valcke también fue investigado por el FBI por un traspaso millonario a las cuentas de Chuck Blazer, quien fuera presidente de CONCACAF, FIFA declara que los depósitos se realizaron pero “para beneficiar el futbol de la zona”.
Ante la presión mediática y de los mismos miembros del comité ejecutivo, Blatter se presenta a una rueda de prensa que convoca de forma urgente, la renuncia era cuestión de minutos y así fue, tras 17 años como presidente deja su cargo y ahora espera la investigación del FBI.